En los primeros días de Ferrari, el autocar o la cabina del vehículo fueron enviados para ser construidos por uno de los tres maestros carroceros. Sin embargo, el chasis siempre fue diseñado y fabricado por Ferrari. El chasis, aunque invisible, sienta las bases de lo que es posible con el resto del vehículo. Después de la fase inicial de nuestro proceso de construcción, que incluye el descubrimiento y el diseño, pasamos inmediatamente a la fase de fabricación. Esto se alinea perfectamente con nuestra filosofía de establecer la seguridad como una prioridad, luego la funcionalidad, seguida de la belleza.

En esta etapa, tanto para las restauraciones correctas de fábrica como para las construcciones personalizadas, se trata el metal, se eliminan el óxido y las abolladuras, y el chasis se transforma inmediatamente en pintura. Tener la fabricación terminada al principio del proceso nos permite simular adecuadamente el espacio y la altura de manejo, así como el tren motriz y el tren de transmisión. Nuestro exclusivo proceso de 25 pasos mantiene los retrasos en la producción al mínimo para que la construcción de sus sueños se complete a tiempo.